Descripción
Esta BBW venezolana es de lo más puta que hay. Justo el día en que el amigo del marido se quedó a dormir en la casa, se acostó en bragas con la esperanza de que se calentara mirándole el culo. Como el tío se quedó dormido, la zorra lo despertó tocándole la polla y se sentó encima suyo para ponerse a cabalgar. Después de una follada tremenda que acabó con una abundante corrida dentro de la boca de la gorda, siguieron durmiendo hasta que el marido se despertó con la polla dura y, al encontrarse con el culo de la esposa tan expuesto, se la folló. ¡Dos polvos en veinte minutos le echaron a la latina putona!
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