Descripción
El chico que encontró hace que todos sus amigos envidien. Un joven natural con el físico de un dios griego. Ella solo puede estar agradecida por esa polla y rendirle homenaje con mamadas lentas y hábiles. Asimismo, no podría considerarse más afortunado: está con una hermosa mujer con experiencia suficiente para trabajar en un prostíbulo. Cada día es un día especial cuando los dos se miran y se entienden, sabiendo que quieren follar, sabiendo que en unos minutos estarán uno encima del otro gimiendo y disfrutando de sus cuerpos perfectos.
